¿Se cagó o se guilló? (Vol. 1)

Tweet Entre varios temas que siempre salen a relucir en mis conversaciones, la música tiene que estar presente, y bueno, ya que tengo un gusto variado en ella, este espacio no tan solo me va a permitir compartir con ustedes los distintos géneros que escucho (y siéntanse en la libertad de ustedes recomendarme a mí también, pa' eso estamos) y aparte de eso, qué mejor que tener mi sección de crítica para alabar o destruir las genialidades y las aberraciones que uno se puede encontrar por ahí.

¿Que de dónde saqué el título? A mi me gustaba escuchar mucho en la Mega (la de Puerto Rico, no la de New York) el show de hip hop que tenían Khalil y DJ Metro (que pena que ya no está... o eso creo), y tenían una sección que más bien era para talentos nuevos que se llamaba "Buy it or flush it", básicamente un 'te gustó o no te gustó', pero con este título obviamente lo traemos a lo latino (castellano boricua, más bien, jaja... si por si acaso entrara algún latinoamericano acá, pues "se cagó", se sobre entiende, "se guilló" es una expresión que significa "sobresaliente"). Es posible que ésta sección se preste también -eventualmente- para películas o libros, por ejemplo, pero por ahora lo primordial va a ser la música.


En esta edición empiezo con el disco nuevo de Draco Rosa, "Amor vincit omnia" (latín para 'El amor lo conquista todo'). Por ahora está desde ya disponible en iTunes, si mal no recuerdo el CD (el físico como tal) sale el 17 de noviembre. Antes que todo, me permito decir que aunque soy fan del trabajo de Draco, hace tiempo me tenía encojona'o con la dejadez que mostraban sus últimas producciones en español (porque "Mad love" es otra cosa)... no sé si fue un estancamiento creativo (que le pasa a todos) o si simplemente estuvo tirando filtrafa pa' acabar el compromiso de discos con Sony, terminar el contrato y largarse pa'l carajo. Anyway, la cuestión es que "Libertad del alma" y "Cómo me acuerdo" fueron CDs para mostrar una canción que valiera la pena y rellenar con las demás, y en el caso de "Teatro del absurdo" (a.k.a. "Vino"), en mi opinión es un audiodocumental, más que una producción discográfica en sí.

Pero ahora llega con "Amor vincit omnia", y este disco (en el 'overall'), sencillamente está cabrón. Hace tiempo que creo que existe la necesidad de que Puerto Rico exporte al mundo (ya sea el 'mainstream' o el 'underground') con un sonido de hoy nuestra música típica, tal como México lo ha hecho a través de Café Tacuba, Argentina a través de Los Fabulosos Cadillacs o Colombia a través de Juanes (aunque no lo soporte tanto). En el disco, Draco abandona la guitarra eléctrica, y se preocupa por traer una ambientación más elegante: cuerdas, percusión, guitarra acústica, metales y sobre todo el cuatro del caballote Christian Nieves. A pesar de que no hay estridencia, liricalmente, no abandona el rock, a mi entender, y es lo que hace este trabajo uno muy interesante, el cual Draco ha descrito que nace del "jíbaro vanguardista", y donde se notan influencias de la música jíbara puertorriqueña, un poco de jazz latino y de son, pero abundo un poquito canción por canción (Nota: Hago la salvedad de que la opinión en las canciones es el 'feeling' que me dan en esas primeras escuchadas, hay veces que con el tiempo la opinión cambia, a veces para bien, a veces para mal):

1. "Esto es vida"
Es una de las "baladas jíbaras" con un fondo de cuerdas al mismo tiempo, donde nos transporta a ese 'amor de jibarito' que compara el fruto de su campo con los frutos que produce el amor.

2. "Amores de mi calle"
La canción tiene un toque de son, pero en vez de predominar el tres cubano, tiene el cuatro boricua, y básicamente (a mi entender) tiene el feeling del trovador de esquina en una plaza que se pasa ligando las mujeres que van andando por la plaza, pero que su piropo es fino.

3. "Espejismo"
La percusión, creo que el acordeón (no tengo el librito de los créditos obviamente, y está el acordeón y el bandoneón, por ejemplo y se hace un poco difícil distinguir en la mezcla) y la flauta son los protagonistas en esta canción. Liricalmente, podría decir que se parece a "Penélope" (del disco "Vagabundo"), y es básicamente la búsqueda de esa mujer ideal en los elementos que nos rodean. Si a la canción le hacen un 'remix' en hip hop con un artista como Tego Calderón, por ejemplo, no me sorprendería porque tiene la vibra para que así sea.

4. "Paraíso prometido"
Este es el sencillo de promoción... y bueno, esta canción tiene el feeling de 'lamento borincano' con la diferencia de que hay una esperanza a la que aferrarse cuando todo parece que va a salir mal. Y si no han visto el video, haz click aquí. Si me preguntas a mí, terminar una reunión con pitorro en mano, eso es el paraíso prometido.

5. "Libre que te quiero libre"
Esta canción tiene una mezcla de 'jibarería' (en el buen sentido de la palabra) y son, con flamenco, y esa combinación es explosiva. Cuerdas, percusión, trompeta, trombón y el cuatro: Draco super tropical... ¡quién lo diría! Pero con canciones como ésta, te das cuenta de que el tipo es un creador de verdad.

6. "Reza por mí"
Esta canción, la más lenta del disco, quizás -a mi entender- se sale de la temática musical del disco, aunque el título es quien la toma de la mano. Liricalmente, es de lo mejor... "Reza por mí, si me quitas tu amor, pa' qué quiero el corazón... anda y reza por mí, si me vas a olvidar, necesito tu oración..."

7. "Obra de arte"
La canción es una balada jíbara que -para mi gusto- empieza un poco lenta, el cuatro es lo que va levantandola y se convierte en el protagonista de la misma, definitivamente.

8. "Mis amigos"
Quizás ésta sea la canción que un fanático recalcitrante que se quedó estanca'o en la época de Vagabundo pueda estar buscando... más que todo por la ambientación oscura, porque la letra puede que sea muy "happy" dentro de esa oscuridad, es otra de las canciones que se sale del concepto musical del disco, pero tiene su magia.

9. "El tiempo va"
El cuatro es lo que inicia la canción y lo que le va dando vida a la canción. Vocalmente es una de las que mejor luce Draco, pues la mayoría del disco tiene este tono de "trovador borracho" y agradable a la vez, pero en ésta canción le da unas texturas cabronas a las voces, mientras se combina con un arreglo de cuerdas y el cuatro y la experiencia es bien surreal... aquí definitivamente deja salir al jíbaro y el final es bien parapelos.

Dentro de ese listado de canciones, las sobresalientes para mí lo son: "Espejismo", "Paraíso prometido", "Libre que te quiero libre", "Reza por mí" y "El tiempo va". Lo especial del disco es ese aire exótico, simple y humilde, que hace de este disco uno ideal para una tertulia entre amigos, una noche con esa persona especial o la excusa perfecta para tirarse un 'road trip' solo o acompañado y viajar a la par con la melodía... el disco es una experiencia tanto para compartir como una experiencia personal.

Draco Rosa con su "Amor vincit omnia", ¿se cagó o se guilló? Definitivamente se guilló... es un disco altamente recomendado por mí para la gente que le gusta "leer por los oídos" como diría mi pana Alkarah (de "Blasfemias y recuerdos"), para la gente que le gusta la buena instrumentación y para aquellos que le gusta la idea de que esas dos cosas se combinen en el mismo sitio...